El capitulo se divide en dos partes, la
adolescente y la adulta.
Mientras que Scott intenta lidiar con el problema de
haber mordido a un junior y que la última vez que eso pasó se acabó
convirtiendo en Kanima, piensan que el chico o se puede convertir en lo que sea
o morir así que intentan ayudarle, pero son bastante novatos con eso y nadie lo convence aunque el mismo vea que
poco a poco va cambiando.
Por lo que
después de varios intentos fallidos, acaban haciéndole una intervención que no
sale como ellos esperaban porque se acaba montando una gran fiesta en luna
llena con un Liam que no sabe que se va
a transformar y una Malia que aun no controla la transformación.
Me encantan
todos los momentos cómicos, aunque la verdad también me gusta bastante la súper relación que tiene Stiles y Malia.
Por otra parte
están los adultos intentando saber quien es el hombre sin boca, por lo que
empiezan a investigar porqué fue detrás de
los wendigos y porque va detrás de Peter y Derek.
Las escenas irónicas o surrealistas que
nos enseña el padre de Stiles son geniales, este hombre cada vez me gusta más.
Al final parece
que Peter acaba matando al hombre sin boca de una forma bastante espectacular,
al más puro estilo familia Hale, pero
lo importante es que hay más mercenarios, como por ejemplo los dos adolescentes
de 15 años amigos de Liam que se dedican también a matar a sobrenaturales como
el hombre de la cerveza.
La parte de Lydia muda me ha cargado muchísimo y
la verdad es que solo me ha gustado al final cuando descubre la lista de gente
que hay que matar, es curioso porque la contraseña es Allison, pero es que
después en la supuesta lista no está
Malia, ni Peter.
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