Llegamos a la recta final y no es de extrañar que todo
lo que había pasado hasta el momento era muy raro!
Todo lo que pasa es una cuenta atrás, Walter decide buscar a
Hector, porque aunque se odie, sabe perfectamente que el pobre viejo odia muchísimo
más a Gus.
Jesse para que no sospechen de él dice que dijo lo del
ricino porque lo veria en House. Es una curiosidad que me ha gustado.
El caso es que Gus después de no haber muerto varias veces
porque Walter siempre pierde la ocasión, va a ver a Hector Salamanca, con la
intención de matarlo pero al final resulta que cae en la trampa y el que acaba
muerto es Gus y Hector, los dos a la vez por una bomba que ha fabricado Walter,
es una escena muy gore, muy Walking dead en su mejor momento.
La frase de Walter da hasta escalofríos “Gus está muerto,
hay mucho que hacer” la verdad es que me encanta todo lo que viene después.
Destruyen el laboratorio y mola muchísimo, son tan chulos! Pero
atención!! Porque eso no es todo, descubrimos que Gus no había envenenado al
niño! Sino que fue Walter con la planta que marco la botella!! Muy ruleta rusa,
ha disparado y no tenia bala, le ha salido perfecto!
La camiseta verde yo creo que simboliza el fin de un
personaje, el final de Walter White y el principio de la era Heisenberg… porque
ha ganado la guerra.
Se merece un 9, yo lo siento en el alma por el protagonista
pero Walter tiene que morir a manos de su mejor alumno, Jesse tiene que matarlo
por todo lo que le ha hecho. Puede que Jesse fuera un Yonkie pero desde que
apareció Walter en su vida todo ha ido a peor, todo lo que le importaba lo ha
perdido o lo han matado.
Impresionante, espectacular, AMAZING!!!!!
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