A Flint cada vez se le va más la pinza
hasta el pinto que mata a su mejor amigo y más leal que ha visto todas las idas
de cabeza.
De todas formas
lo hace porque se ha ido de la lengua y se lo ha contado a los demás, pero en
realidad no le había contado nada a nadie, solo que el contramaestre si que
sospechaba de todo por lo que había
pasado con Billy.
Así que decide
no creer en la supuesta muerte del antiguo contramaestre y alzarse en contra de Flint, por suerte Silver siempre está
al tanto de todo y consigue que el plan original se lleve a cabo.
Todo parece
acabado pero llegan a la isla donde está
el Urca, que por culpa del tiempo se estrelló y todo el dinero está
esparcido en la arena.
Vane consigue el
fuerte a base de fuerza y le dice las
cosas claras a Eleanor, que si quiere seguir al mando será porque él quiere
así que ya están cambiando aquí las cosas.
La serie está bastante bien, pero no me
quita el sueño y cuando digo que no me lo quita es que el típico maratón en
el que no quieres ni comer ni dormir para poder seguir viendo capítulos, no te
da, pero la historia está entretenidísima por lo que le voy a poner un 7.
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