En el pasado conocemos a Lumiere de la bella y la bestia, cuanta que fue convertido en un
candelabro por que no pagó sus deudas con el oscuro y que ayudara a Neal y Bella a encontrarlo si después
le liberan, pero todo esto es una maquinación con la bruja malvada.
En la vida real, aparece Neal, pero no se acuerda de nada, solo
sabe lo mismo que todos, pero que ha aparecido más tarde, además que su hijo no
le recuerda y quiere hacer que le recuerde cueste lo que cueste.
Emma y su padre encuentran a Gold rápidamente pero el hombre está
demasiado loco para contestar sus preguntas, eso de morir y vivir le viene
grande hasta al oscuro.
Lo siguiente que se ve es a Regina ligando con Robin, pero mucho
más descarado, en el bosque ella está más a la defensiva en cambio aquí sonríe más
hasta que se da cuenta de la marca del tatuaje y le da un bajón porque se
supone que es su alma gemela, creo que si se trata de alma gemela es porque los
dos amaron antes a sus respectivos y ahora
estaban solos ante el mundo y se han encontrado para acompañarse
mutuamente.
Me ha gustado mucho todo lo que han
hecho con la llave del oscuro y una vida por otra, no me esperaba para nada que
Rumpel y Neal fueran la misma
persona.
Da mucha pena que Neal muera, pero las cosas como son, ha
llegado a ser como Krillin en Dragon ball, muere, vive, muere y vuelve a
vivir, así que cuando muere y se despide de ellos por tercera vez como que ya
es como ir a baño que pasa sin pena ni gloria.
Lo bueno de todo esto es que Gold ha dejado de estar loco y ahora
tienen a alguien poderoso y con ganas de venganza por su hijo muerto.
Rumpel
vuelve a su jaula.
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