Bonnie ha vuelto y han preparado una gran fiesta para ella, pero lo
que no saben sus amigas es que ser el ancla conlleva un gran dolor para la
pobre exbruja.
Jesse ahora es un vampiro, pero
no uno normal, sino uno que solo se sacia con sangre de vampiros, supongo que
será por Agustine, aunque bien
podrían decir que es sangre del padre de los originales que también se
alimentaba de sangre de vampiro porque odiaba que los vampiros se alimenten de sangre de humano.
Es como repetir la misma historia.
Todo esto lo descubre Damon,
gracias a la tortura que le provoca al profesor, pero Elena le prohíbe que lo
mate así que no lo hace, en ese momento aparece Jesse que ve como Damon sangra
y se vuelve loco.
Intenta devorarlo, pero en principio Damon es más fuerte porque es más
viejo, pero no, el experimento del profesor también hace que sean más
fuertes, porque con este nuevo sujeto lo que quiere es eliminar a todos los
vampiros.
Justo aparece Elena cuando Damon
está siendo devorado y aunque al principio intenta detener a Jesse, luego actúa
rápido y mata a Jesse. Caroline se
enfada muchísimo porque dice que la Elena de antes no lo habría matado, pero
bueno es rubia, y odia a Damon, así
que su argumento me importa poco.
Por otro lado la historia de Bonnie me aburre un poco y que lo haga
con Jeremy me sobra, parece que no lo hubieran hecho antes…
Stefan y Katherine cada vez están
más juntos y la verdad es que me gusta, Stefan necesita a alguien en su vida
que le de caña porque le hace ser más divertido o más entregado, al final como
dije en anteriores capítulos, a Stefan y
Katherine les per toca estar juntos, en realidad Elena debería tener otra
replica destinada.
Caroline me cansa, lo peor es que todo el rato nos hacen que veamos lo
malo que es Damon para Elena, cuando en realidad es más feliz que nunca.
Sorprendente final, donde Damon había sido el vampiro Agustine!
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