viernes, 23 de agosto de 2013

Grimm 2x09-10


Ya llevábamos un tiempo sin hablar de Grimm por aquí, y eso que la segunda temporada de la serie dió un giro radical a lo que estábamos acostumbrados de ella. No vamos a dejar que se os olvide tan fácilmente que vale la pena verla, así que vamos a comentar dos capítulitos más de esta genial segunda temporada de Grimm.

El 2x09 se junta Halloween con un nuevo caso para Nick. Esta vez, la Llorona, un espíritu salido de las leyendas megicanas, hace su aparición. Pero lo importante, como siempre, no es el caso, sino todo lo que le rodea. Por un lado tenemos a la esposa del protagonista, intentando recuperar su memoria. Esta vez contacta con una mujer, mejicana, que también ha tenido trato con el propio policía. Sorprende lo bien que habla la actriz en castellano aunque se nota muchísimo que no es su idioma natal, pero quizás por eso tiene tanto mérito. Por otro lado tenemos a Monroe, como no. Le encanta celebrar Halloween así que lo vive muchísimo. Volviendo al caso, no es que pase nada crucial, es típico caso como en los viejos tiempos, con Hank y Nick mano a mano.

Pasando al 2x10, tenemos una especie de asesino matando Wesens; Un psicópata de Wesens se puede decir. Al final, no resulta ser más que otro Wesen que tiene un problema mental, o no le gusta vivir como lo que es. Es normal, es una especie de bicho feísimo. Por otro lado, Juliette no recuerda a Nick para nada y solo quiere estar con el comisario. Éste sabe que están haciendo las cosas mal y, aunque comparte esos "sentimientos", ambos están de acuerdo en que deben encontrar una solución ya que no pueden seguir ocultándole a Nick lo que está pasando. Lo que más me ha gustado de este capítulo es ver como todos los Wesen veneran al Grimm como si fuera un super ser con super poderes y fuerza muy loca. Sin embargo Nick no es más que una persona normal con la intuición propia de un policía. Pero claro, eso ellos no lo saben, por eso es gracioso ver como Wesens que podrían arrancarle la cabeza de un bocado, se tiran de rodillas suplicándo perdón. Un detalle muy bueno.

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