La última pareja que falta por romper es nada más y nada
menos que Nick y Robin, era evidente. La cosa es que Robin no se daba cuenta
que Nick era tonto hasta que dejó de hacerlo con el, ahora que ya sabe que no
sabe sumar 2+2 no sabe como romper con el, por pena, porque le pone muchísimo,
porque ese cuerpo no lo tiene cualquiera, porque sale en la tele… da igual el
caso es que no se atreve.
Sus amigos le dan consejos, que lo mejor es cortar en la pastelería para cortar. Pero como sigue sin atreverse Barney le da un ultimátum, si no lo deja en unas horas tendrá una cita con Patricia, una chica que odia con toda su alma.
Al final cuando ya no es capaz de hacerlo aparece Barney
para declararse literalmente, pero bueno que sí, rompen y el hace ver que todo
era teatro pero claramente eso era sentimiento puro y duro.
Por otro lado Lily y Marshall no pueden hacer nada con
Marvin en la casa así que andan desesperados, eso hace que Marshall cree un
equipo de básquet y son todos horriblemente malos, pero más malo es Ted y su
equipo de arquitectos.
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